Imagen - Vasija de Cacao - K6706 © Justin Kerr FAMSI © 2004:
Emily McClung de Tapia y Yoko Sugiura
 

La vida prehispánica en un habitat insular construído por el hombre en la Ciénaga de Chignahuapan, Santa Cruz Atizapan, Estado de México, México
Traducido del Inglés por Alex Lomónaco
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Ciénaga de Chignahuapa, Santa Cruz Atizapan, Estado de México

Año de Investigación:  1999
Cultura:  Teotihuacán
Cronología:  Pre-Clásico al Epi-Clásico
Ubicación:  Santa Cruz Atizapan, México
Sitio:  Cienaga de Chignahuapan

Tabla de Contenidos

Introducción
Estudios paleoambientales en el Valle de Toluca
Asentamiento en la zona lacustre
Objetivos
Análisis macrobotánicos
Análisis de polen
Evidencia osteológica humana en enterratorios
Análisis químico de residuos en cerámicas
Análisis de residuos en pisos
Restos faunísticos identificados en Santa Cruz Atizapan
Conclusiones
Lista de Figuras
Referencias Citadas
Apéndice 1. Residuos químicos en recipientes cerámicos, Santa Cruz Atizapan, Estado de México.
Apéndice 2. Residuos químicos de pisos, Montículo 20, Santa Cruz Atizapan, Estado de México.
Apéndice 3. Materiales faunísticos recobrados en el Montículo 20, Santa Cruz Atizapan, Estado de México.

Introducción

El Valle de Toluca (Figura 1) situado al oeste de la Cuenca de México, es el más alto de la República Mexicana (elevación mínima: 2572 m), y tiene una extensión de aproximadamente 1600 km2. Como en la Cuenca de México, varios lagos y ciénagas poco profundas jugaron un papel importante a lo largo de la dilatada historia del Valle de Toluca. La zona lacustre, conocida como "Ciénagas del Alto Lerma", consta de tres pantanos y áreas adyacentes costeras que cubren alrededor de 300 km2, delimitados por el "tierras malas" (badlands) de San Mateo Texcalyacac al sur, las tierras bajas de la Sierra de las Cruces al este, una serie de volcanes jóvenes al norte, y la planicie aluvional al oeste. Normalmente, las tres ciénagas forman cuerpos de agua separados que se contectan por medio del Río Lerma. Sin embargo, cuando las napas freáticas suben, se forma un inmenso pantano que de vez en cuando inunda toda el área adyacente y cubre un área que se extiende aproximadamente 30 km en dirección N-S y 10 km en dirección E-O. La ciénaga que se encuentra más al sur es llamada Almoloya o Chignahuapan (Figura 2, abajo). Lerma o la Ciénaga de Chimaliapán está situada en el centro, y la ciénaga de más al norte es conocida como San Bartolo o Chiconahuapan.

Contrariamente a la Cuenca de México que hoy es una unidad hidrográfica cerrada, la actividad volcánica y tectónica durante el Holoceno Temprano abrió el Valle de Toluca. Numerosos manantiales situados a lo largo de las tierras bajas de Las Cruces y la Sierra del Ajusco, junto con ríos y tributarios que descienden de las laderas circundantes alimentan las ciénagas y el Río Lerma, cuya fuente se encuentra en Almoloya del Río, que fluye hacia el norte para finalmente desembocar en el Pacífico via el sistema hidrológico conocido como Lerma-Chapala-Santiago. Más que conformar un solo ecosistema, la zona lacustre constituye un complejo mosaico de micromedioambientes: costas de lagos, ciénagas y aguas profundas, un área extensa de "tierra flotante" (en el lugar se la llama plancha), que está probablemente formada por vegetación acuática y semiacuática en descomposición en sectores relativamente poco profundos, un área que se ve afectada por el constante surgimiento de agua de manantiales, y rasgos antropogénicos tales como canales y otros cursos de agua, áreas para lavar la ropa y muelles. Las aguas abiertas estaban limitadas a un sector relativamente pequeño.

Las extensas ciénagas, que incluyen áreas cubiertas ya sea por las planchas o por comunidades de vegetación acuática, semiacuática y flotante, constituyen la zona ecológica más importante. Sin embargo, a pesar de la abundancia de recursos de flora y fauna en esta comunidad, representa un ecosistema inestable e inmaduro. La estabilidad del ecosistema se ve grandemente afectada por las lluvias estacionales y las fluctuaciones en la napas freáticas, causadas por episodios climatológicos regionales.

Las investigaciones etnoarqueológicas recientes llevadas a cabo en el Valle de Toluca, indican que la historia del asentamiento en el área de estudio está directamente relacionada con el papel de los recursos lacustres en el sistema de subsistencia de las comunidades costeras (Sugiura 1998), tan cerca en el tiempo como tres décadas atrás, cuando se concluyó con el drenaje y la consecuente desecación de las ciénagas. Los habitantes del área practicaron una estrategia de adaptación generalizada con respecto a los recursos disponibles, que se caracterizó por la explotación indiscriminada de diversos recursos bióticos, una notable flexibilidad en las actividades de subsistencia y la articulación simultánea de varios sistemas de subsistencia. No se requiere ni una tecnología compleja ni un alto grado de especialización, sino más bien habilidad individual y experiencia, junto con un profundo conocimiento del entorno. Este sistema flexible, libremente estructurado, facilita la explotación de los recursos disponibles.


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La vida prehispánica en un habitat insular construído por el hombre en la Ciénaga de Chignahuapan, Santa Cruz Atizapan, Estado de México, México  (1.31 MB)

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Entregado el 1 de mayo del 2000 por:

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